lunes, 21 de noviembre de 2011

Y quien sabe por qué nos perdimos; por qué nos buscamos y no nos vimos.

Que no me importa si follas o fallas. Si estudias o prefieres trabajártelas. Sólo me importa el daño que le has podido llegar a causar a mi cuerpo, qué le has hecho que ahora sólo emite odio. ¡Para qué engañarnos! Te echo de menos y no sabes cuánto. Ni las veces que pasas por mi cabeza que hasta ya me duele. ¿Un recuerdo? El día que te fuiste, no entiendo cómo me dejaste marchar de aquella manera, si cuando estábamos al lado éramos dos en uno; o almenos eso me hiciste creer. Pero esque también recuerdo todo lo bueno, y no sabes cómo me hace falta tener uno más. Y ahí estás, reaciendo planes, olvidándote de quién soy, olvidando que esta niña sonreía cuando tú la animabas, cuando con una simple palabra estúpida la hacías feliz durante todo un día. Te olvidaste de volver, de necesitarla, de llamarla para abrazarla. ¿Pero sabes? Que no me importa. He llorado hasta no poder derramar una lágrima más y me confundo tanto que me estoy volviendo hasta idiota. ¿Quieres saber una verdad?. Me he enamorado de un gilipollas como tú.

No hay comentarios:

Publicar un comentario